MEJORAR UNA FOTOGRAFÍA DE FORMA BÁSICA

Y por fin, después de una larga espera, comienzan ya los tutoriales más prácticos de Photoshop. Reconozco que el primero sobre la instalación del programa y el otro sobre el funcionamiento de Photoshop son un poco coñazo. Pero realmente son necesarios para no perderte a partir de ahora. A demás, si no quieres perder el tiempo y frustrarte, te recomiendo que te descargues la guía de Photoshop que he preparado. Abajo del post puedes suscribirte al contenido del blog para obtenerla. Fácil, ¿no? Pues a por el tutorial que vamos:

HOY APRENDEREMOS:

 Los pasos a seguir para editar una fotografía de forma básica.

 Qué es el reencuadre y cómo reencuadrar una fotografía.

 Qué es el enfoque y cómo podemos mejorar el enfoque de una fotografía.

 Qué es la exposición y cómo controlarla con Photoshop.

 Qué es la temperatura de color y cómo podemos cambiarla para conseguir un efecto más cálido o más frío en una fotografía.

 Qué es el contraste y cómo podemos añadirlo o quitarlo en Photoshop.

Como siempre digo, en Photoshop hay infinitas formas de hacer las cosas. Yo os voy a enseñar hoy las formas más básicas de hacerlo. Con el tiempo os enseñaré cuales formas son mejores para editar una fotografía más profesionalmente. Pero de mientras, veamos las más sencillas:

 PASOS A SEGUIR PARA EDITAR UNA FOTOGRAFÍA DE FORMA BÁSICA

Lo primero primero de todo es tener nuestra imagen abierta en Photoshop. Se puede abrir de dos formas: Bien en Archivo > Abrir y seleccionando mediante el explorador la imagen  o bien seleccionando la fotografía ubicada en nuestro disco duro y arrastrando el icono de ésta al icono minimizado de Photoshop en la barra de inicio y, sin soltar, esperar a que se maximice y soltar la imagen en el programa ya abierto.

La imagen que yo he escogido es una que, bajo mi punto de vista, está muy plana y necesita una mejora para que nos transmita visualmente algo.

Una vez abierta vamos a ver el procedimiento a seguir:

PASO 1: REENCUADRE DE LA FOTOGRAFÍA

El encuadre es, de una forma sencilla, la parte que queremos que se vea mostrada en nuestra fotografía. Para que una fotografía funcione, siempre tiene que haber un punto de interés como mínimo. En el caso de una puesta de sol podemos decidir si dar mayor protagonismo a los colores del cielo no encuadrando al sol. O si queremos dar protagonismo al sol encuadrándolo en nuestra fotografía.

Por tanto el término reencuadrar se considera volver a encuadrar una fotografía. Es decir: “recortar” la parte que no nos gusta de esta. No todas las imágenes necesitan ser reencuadradas. Muchas veces disparamos con el encuadre ideal y este paso podemos omitirlo. 

En el caso de mi fotografía, el punto de interés son dos: La modelo y las dos flores rojas que hay cerca de ella. Yo tomé ese encuadre porque en ese momento creía que cuanto más amplitud dejara encuadrada, mayor sensación de espacio iba a transmitir. Y sí, así se consigue ese efecto. Pero cuando vi esta imagen en mi ordenador, tranquilamente, me di cuenta que, sin quererlo, mis ojos obviaban los árboles del fondo porque la línea delimitadora del suelo y color del uniforme de éste crea una especie de marco a la modelo separando la parte de los árboles de ella y de las dos flores rojas. Y en fotografía, lo que no nos ayude a mejorar la composición de una fotografía… podemos prescindirlo.

1. Seleccionamos la herramienta recortar y vemos que nos aparece un marco de líneas discontinuas alrededor de la imagen que nos ayudará a reencuadrar la imagen si pinchamos y arrastramos en cada esquina o lateral de la imagen.

2. La barra de opciones de la herramienta podemos decidir cómo queremos que sea el recorte:

 Sin restricciones: nosotros elegiremos el tamaño y el alto de la fotografía cómo deseemos. Personalmente no es algo que recomiende, ya que no queda muy profesional entregar las fotos de un tamaño cada una. Primero por estética y segundo porque si van a querer imprimirlas, no se van a adaptar a los formatos estándar de los álbumes, marcos, etc…

 Manteniendo la proporción original: Es la que yo recomiendo siempre. Todas las fotos quedaran siempre con las mismas proporciones y en el caso de querer imprimir alguna para un álbum o un marco, nunca tendremos problema.

 Cuadrado: Las proporciones se verán totalmente cuadradas.

 Otras proporciones: Hay unas cuantas proporciones variadas para que escojamos si alguna de ellas nos interesa.

3.  Cuando tengamos el reencuadre ya decidido le damos a aceptar.

PASO 2: ENFOQUE

Siempre es conveniente revisar el enfoque aunque creamos que está perfecto. Os aconsejo que si está perfectamente enfocada no abuséis mucho de él. Y por el contrario… si la fotografía está muy desenfocada que la descartéis de inmediato porque Photoshop no hace milagros. En el caso de mi fotografía, no está perfectamente enfocada la modelo. Pero en este caso no pasa nada, porque se ve de lejos y, a simple vista parece que está enfocada. En estos casos aplicaremos enfoque a la imagen. Para mejorar un poco el enfoque vamos a:

1. Menú Filtro > Enfocar > Enfoque suavizado. Nos aparece una ventana nueva con unos deslizadores para controlar el grado de enfoque y el tamaño del radio de éste.

Para enfocar una imagen siempre vamos a tener que verla ampliada al 100% para mayor precisión.

2. Aceptamos y el ajuste nos aparece en la imagen. Muchas veces podemos no notar el enfoque, pero ahí está.

PASO 3: EXPOSICIÓN

No me voy a poner técnica con el tema de la exposición hablándoos del número F y la velocidad de obturación. Seré simple: La exposición es la cantidad de luz que tiene una imagen. Si está oscura diremos que está subexpuesta y si está demasiado clara diremos que está sobreexpuesta.

Para controlarla vamos a hacerlo de la forma más sencilla pero menos correcta. No vamos a salir de este tutorial siendo unos genios de Photoshop, sólo nos estamos iniciando. Ya aprenderemos las mejores técnicas y el por qué usarlas.

1. Vamos al menú Imagen > Ajustes > Exposición. Nos aparecerá una ventana con deslizadores. Nosotros sólo vamos a tocar el deslizador de exposición y nos aseguraremos de que la casilla de Previsualizar esté siempre marcada para poder ver los cambios que estamos haciendo en nuestro documento original.
Si nuestra fotografía está muy oscura, moveremos el deslizador a la derecha para aclararla. Si está muy clara, moveremos el deslizador a la izquierda para oscurecerla.
Para ver el cambio antes de aceptar la fotografía, desmarcamos la casilla de Previsualizar para ver el estado inicial.

A mí, personalmente, me gustan que siempre estén más claras que oscuras. Muy raro es que las deje con la exposición técnicamente correcta. Esto va en función de nuestros gustos y de cómo nos resulta la exposición de nuestra fotografía a nuestros ojos.

Al igual que el reencuadre, no siempre es necesario ajustar la exposición.

PASO 4: TEMPERATURA DE COLOR
Siguiendo la línea de, de momento, no usar tecnicismos… Vamos a definir la temperatura de color cómo el color de la luz. ¿Os habéis fijado que cuando hacemos fotos en la calle salen más azuladas y en casa con la luz de la mesilla salen más amarillas? Pues eso es la temperatura de color. Cada fuente luminosa tiene una temperatura de color. Es posible que ya no notemos la diferencia de esto que comento porque las cámaras de hoy en día, hasta de los móviles, vienen preparadas para ello mediante modos: Modo retrato, Modo paisaje, Modo noche, Luz día, AWB (temperatura de color automática)… Os suena esto que os digo, ¿no?

Bien, pues ajustando la temperatura de color con Photoshop podemos conseguir dar un efecto más frio (si tiramos por los azules) o más cálido (si tiramos por los amarillos).

1. Vamos al menú Imagen > Ajustes > Equilibrio de color y nos aparecerá una nueva ventana con varios deslizadores. Para ajustar la temperatura de color basta con mover el deslizador del color Amarillo – Azul a un lado o a otro.

2. Este menú nos permite decidir sobré tonos queremos cambiar la temperatura de color. Bien las sombras, medios tonos o iluminaciones. Así que vamos a empezar ajustando las sombras:

3.  De la misma forma modificamos los medios tonos y las iluminaciones hasta conseguir el efecto que queramos. Y damos a aceptar.

PASO 5: CONTRASTE
Con este último ajuste la imagen ya parece otra cosa, ¿no? Vamos a darle el remate final justando el contraste para darle más carácter.

Vamos al menú Imagen > Ajustes > Brillo y contraste. Nos aparecerá otra ventana con deslizadores. De los cuales sólo moveremos el contraste hasta que quede a nuestro gusto.

PASO 6: GUARDADO DE LA IMAGEN
La imagen final que nos quedaría sería esta:

En la guía os lo explico muy bien con los distintos formatos para guardar que tenemos, pero vamos a suponer que la queremos para subir a la web.
1. Archivo > Guardar como
2. Buscamos la ubicación donde queremos que se guarde y le cambiamos el nombre.
3.  Buscamos el formato al que queramos convertirlo. En nuestro caso es .JPG

4. Una vez que la hayamos guardado, nos aparecerá una última ventana donde recomiendo siempre tener el deslizador en Máxima calidad.

Et volilà! Ya hemos terminado. Este es el resultado final:

Insisto que es de una forma básica. En las ventanas que nos han ido saliendo nos han ido apareciendo deslizadores que no hemos usado. Calma pequeños padawans, todo llegará y os enseñaré la mejor forma de hacerlo. Aunque si mientras seguís el tutorial trasteáis con los demás deslizadores iréis descubriendo nuevos efectos y nuevas cosas que os van ir de perlas para haceros con el programa.

Espero no haber sido muy cansina. Quiero que os quede todo lo más claro posible, pero al principio los tutoriales van a ser un poco más extensos porque aún tengo que enseñaros conceptos para quien no esté tan metido en el mundillo :P

Contadme dudas o sed sinceros si me explico peor que un búho, hahaha. En el próximo tutorial vamos a aprender los principales efectos de color que se pueden añadir a las fotografías. Si os interesa os recomiendo que con calma hagáis el tutorial una tarde tranquila con una buena merienda al lado.

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